Por: Laura Escobar.

El pasado miércoles 8 de abril, la Organización Cultural TVRobles expresó su preocupación por la desactivación de las políticas culturales en la ciudad capital presentando en el Centro Cultural de Bellas Artes la conferencia titulada “Políticas Culturales en Lima: ¿Hacia dónde vamos?” que tuvo como objetivo dar a conocer los avances y retrocesos de nuestra ciudad en materia de políticas públicas del sector cultura, estableciendo un espacio para su disertación entre sus representantes y la ciudadanía.  

El panel de expertos estuvo conformado por Pedro Pablo Alayza Tijero, quien abordó el tema de “Políticas culturales públicas: la lucha por la continuidad”; César Ramos Aldana con “Gestión pública en espacio público. Un caso exitoso: CREALIMA Huiracocha” y Javier Lizarzaburu Montani con el tema “Lima Milenaria, el patrimonio arqueológico al servicio de la ciudadanía y la inclusión social”.

Para Pedro Pablo Alayza Tijero, ex gerente de Cultura de la Municipalidad Metropolitana de Lima, la cultura cohesiona la sociedad y hace que pensemos juntos en un proyecto común. La actividad cultural permite reconocernos unos a otros, retomar los espacios públicos y debe ser la municipalidad el elemento articulador de los actores culturales de una ciudad.

¿Qué tenemos que hacer? Para Alayza, hay tres medidas a tomar para que se respeten las políticas culturales y se luche por darles continuidad:

- Establecer una Mesa de Concertación, que sea un espacio real y no virtual, donde los colectivos se reúnan y de manera conjunta presenten un pedido formal a la Municipalidad de Lima para que se respete el derecho ciudadano a la cultura.

- Incorporar al Acuerdo Nacional una postura contundente sobre cultura. Los partidos políticos deben reconocer el derecho de los ciudadanos a contar con políticas culturales e incorporarlo a uno de los grupos de trabajo.

- Exigir al Ministerio de Cultura la creación de una Dirección Desconcentrada de Cultura (https://www.cultura.gob.pe/es/ddc) para Lima que trabaje conjuntamente con la municipalidad y generen políticas conjuntas en comité.

Democratizar la cultura desde el espacio público

César Ramos, ex Director del CREALIMA Huiracocha, comentó la importancia de CREALIMA como la Primera Red de Centros Culturales organizados desde la Gestión Pública. “No se trata de hacer arte o cultura para la comunidad sino desde la comunidad. La inversión en estos Centros Culturales busca democratizar el espacio público desde los parques zonales”, sostuvo Ramos. El expositor mencionó el caso del distrito de San Juan de Lurigancho, donde las mujeres lideran el distrito, tuvieron estos espacios públicos para fortalecer los procesos de socialización donde todavía hay rezagos de violencia política.

Los Centros de Cultura, Recreación y Educación Ambiental (CREA) se instalaron en los parques zonales de Lima, desde allí se realizaban actividades de difusión cultural. El objetivo de estos espacios era la construcción de ciudadanía y el fomento de la producción cultural local, que buscan sensibilizar a los visitantes sobre la problemática ambiental del entorno urbano.

El problema es que no hay continuidad y por eso es necesario que las políticas públicas se sustenten desde los ciudadanos: “¿Hasta cuándo vamos a seguir ocultando nuestras responsabilidades?”, enfatizó Ramos.

A puertas del Bicentenario son los ciudadanos los que deben proteger la democratización de la cultura desde los espacios públicos.

La creación de ciudadanía a través de los sitios arqueológicos

En el año 2009 no existía información sobre la cantidad de huacas que había en Lima, en cambio para el año 2014 ya se tenía información de 450 sitios arqueológicos en la ciudad. Fue Javier Lizarzaburu Montani quien impulsó la Campaña Lima Milenaria para proponer que el patrimonio arqueológico esté al servicio de la ciudadanía y la inclusión social.

“La campaña Lima Milenaria tiene como idea central que la fundación española de Lima no fue su inicio, sino un hito más en una larga transformación de este territorio. La evidencia arqueológica habla de más de 4.000 años de civilización, y 2.000 años desde la primera ciudad de Lima (Maranga). Hoy en día se enfoca en temas de ciudad y patrimonio, proponiendo al Bicentenario como una fecha para la reconciliación nacional desde la puesta en valor de su riqueza cultural.”

Para el 2011, El Comercio se une a la campaña, luego se suma el Congreso de la República, Perú Marca País y en el 2012, la Municipalidad Metropolitana de Lima decreta a la Ciudad de Lima como “Lima Ciudad Milenaria, Ciudad de Culturas” y de interés prioritario la protección, conservación, investigación y difusión de su patrimonio. Para cuando se realiza el CADE 2013, los empresarios señalan a las huacas como recurso para el turismo.

Lizarzaburu explica que un proyecto como Lima Milenaria se hizo posible porque los ciudadanos han cambiado, se han comprometido y “[...] ahora sienten que los sitios arqueológicos son su responsabilidad y parte de su identidad.”

¿Qué queda por hacer por el patrimonio arqueológico?

De acuerdo a Lizarzaburu, se deben respetar las Políticas Municipales para la puesta en valor de los Centros Arqueológicos. También el expositor indicó que el Ministerio de Cultura de tomar cartas en el asunto para proteger y conservar los sitios arqueológicos, hasta se debería incorporar el tema de las huacas a la currículo escolar.

Cabe señalar finalmente que ante las preguntas del público, los tres ponentes coincidieron que es la ciudadanía organizada la que debe exigir sus derechos, no depender solo de los funcionarios. “Es importante no quedarnos en la queja”.