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Miguel Ángel Vallejo Sameshima: “Para mi no existe la literatura Nikkei”

Entrevista al escritor participante de las actividades del 3er Festival Cultural Nikkei.

Publicado: 2016-04-10

Por: Patricia Páez

Miguel Ángel Vallejo Sameshima, escritor peruano, nos habla un poco sobre su obra y la exposición “Escritores nikkei peruanos” que se presentará el próximo 19 de abril en la Galería Ryoichi Jinnai del Centro Cultural Peruano Japonés”.


¿Cuál es el objetivo de esta exposición?
La muestra la organiza la Asociación Peruano Japonesa, se trata de nueve autores de distintos géneros, distintas generaciones, el más conocido es claro José Watanabe, fallecido, está en poesía también Doris Moromisato y Tilsa Otta, Juan Carlos de la Fuente Umetsu; en el caso de narradores está Carlos Yoshimito, yo, bueno el maestro Augusto Higa y Nicolás Matayoshi, cronista huancaíno. Entonces lo que me cuentan, porque va a ser una sorpresa para los nueve participantes, es que han hecho retratos de cada uno de nosotros y va haber además textos sobre nuestra obra curados por Ricardo González Vigil, que es uno de los críticos literarios más conocidos del Perú.
Ustedes son de diversos géneros, pero quizás tienen algo en común ¿qué podría ser?

Pregunta curiosa. Yo he leído por azares del destino a todos, no ha sido una búsqueda, y es difícil encontrar una relación tal vez entre varios: hay una cuestión muy visual tanto en la poesía de Tilsa como en la de Juan Carlos de la Fuente, y lo de Watanabe, hay gente que dice que tiene formas muy similares al Haiku en el sentido de presentar una imagen, otra desarrollando esa primera imágen y un final sorprendente sobretodo en cosas del cuerpo.  

En el caso de los narradores sí creo que hay una cuestión muy clara de marcar una identificación con el espacio, con el Perú, es caso de Fernando Iwasaki. Yo tengo también un libro testimonial sobre mi familia paterna que es “Vallejo Urreta: historias de una familia peruana”, y el caso de Augusto Higa es bastante emblemático en ficción, porque él parte desde su primer libro de cuentos “Que te coma el tigre” que es del 76-77, a hacer historias de collera, de barrio, que se desarrolla un poco más en el segundo libro “La casa de alba celeste” que es del 86, y ya empiezan a aparecer elementos nikkei a partir de un viaje que hace Augusto Higa a Japón y que narra en un libro testimonial, “Japón no da dos oportunidades”, que es toda su experiencia en Japón.

Creo que en el caso de la poesía, la visualidad y ciertas estructuras de la poesía tradicional japonesa, están presentes, y en el caso de la narrativa el vínculo con el espacio, con el Perú; aunque en el caso Watanabe podría decirse lo mismo, que es poesía, también el vínculo con el Perú.

¿Cómo inició su pasión por la literatura?

Escribo desde los trece años osea que prácticamente no concibo mi existencia cotidiana sin escribir un poco. Esta novela “La muerte no tiene ojos” es mi décimo libro entre ficción y no ficción, para niños, para adultos. Desde hace cuatro años tengo la suerte de tener empleos que me permiten mucho tiempo para escribir, entonces cumplo con la metáfora de escritor profesional que en el Perú ha inventado Vargas Llosa, que no es la única forma de escribir desde luego, pero es lo que muchos acá desde muy chicos entendimos que era el trabajo: escribir con horarios, con plazos, revisar de manera exhaustiva, siempre tener un proyecto allí; y en el caso de esta última novela, tiene que ver con lo que estoy escribiendo recientemente que es literatura fantástica. 

Esta novela es una historia de inmortales que habla de un antiguo vínculo entre el Perú prehispánico y el antiguo Egipto que da como origen a esta hoja de coca roja, mestiza, que es la que produce la inmortalidad; de ahí nace un romance entre un esclavo mestizo peruano-egipcio y una princesa de allá y la historia va desarrollándose a lo largo de 3000 años donde se incluye una secta de cazadores de monstruos donde el brazo armado son los danzantes de tijeras.

Hay un choque de culturas bastante diferentes.
Sí, me han dicho que se parece a películas de serie V, y estoy de acuerdo porque parte de muchos de esos referentes. Sí siento como lector, no como escritor, que el libro es de todos, que hay la intención de desarrollar novela histórica pero obviamente pues son hechos por momentos absurdos: desde el contacto entre antiguos peruanos y egipcios tan absurdo como las teorías de conspiración tan de moda y para evitar que llegue al ridículo tengo que poner datos históricos precisos. Por ejemplo, en la novela hay una huelga en el Egipto de Ramsés III, que es la primera huelga documentada de la historia de la humanidad, osea esa huelga existe, hay una investigación histórica, pero luego aparecen elementos como danzantes de tijera voladores, grandes combates sobrenaturales, y bueno, el centro del libro es la inmortalidad osea parte ya de este elemento fantástico que modifica toda la realidad.
¿Y cómo ha sido el paso de la novela testimonial a la novela de ficción?
Bueno yo he escrito varios novelas para niños, tengo un libro de cuentos góticos que es “Monstruos de ayer, hoy y uno de mañana” y uno de esos cuentos da como origen esta novela. De otro lado sí pues “Vallejo Urreta: historia de una familia peruana” es un libro periodístico, no es de ficción, es de no ficción, y es parte de combinar ambas pasiones. Yo he sido periodista cultural varios años en El Peruano, en Andina, y de alguna manera a veces siento que la ficción realista, la ficción fantástica y el periodismo son tres formas de la misma cosa, solo que tienen distintos discursos y en el caso del periodismo uno tiene el compromiso de estar inventando cosas pero que narrativamente pueden combinarse los discursos de estos tres géneros. Entonces siempre siento que estoy haciendo lo mismo, con distintos márgenes, distintos cánones y lo más divertido es transgredirlos en realidad.
¿Qué opinas sobre este evento que se realizará en el APJ?
Es interesante ver una muestra de autores nikkei, sobre todo por el concepto de literatura nikkei: para mi no existe la literatura nikkei porque digamos no es un género literario, no hay tendencias muy claras o no hay grupos de autores que sean descendientes de japoneses que hayan ido con una propuesta estética o ideológica, no existe la literatura nikkei, pero hay literatura escrita por descendientes de japoneses, que son muchos, como cada colonia en el Perú tiene escritores, artistas y eso lo hace llamativo, tratar de ver o inventar quizás coincidencias o diferencias entre los puntos de vista de los autores y es curioso ¿no? osea, es el mes de las letras no solo acá, en todo el mundo, si no es en la APJ esto creo que no es en ninguna parte.
¡Muchas gracias!
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