Por: Kiara Barrios.
Hoy se celebra el Día Internacional del Libro y la Escuela Nacional Superior de Arte Dramático (ENSAD) no pudo escoger mejor fecha para hacer la presentación del tercer tomo del libro “Teatro Peruano. Colección Bicentenario” que reúne a doce trabajos de dramaturgia que abordan la etapa republicana desde el grito libertario.
TVRobles tuvo la oportunidad de conversar con una de las personas que forman parte de la edición: la destacada Celeste Viale Yerovi, actriz y directora de teatro con más de 50 años de experiencia en dramaturgia infantil y adulta. Su vida, marcada por el arte, la ha llevado a ser fundadora de la Asociación Cultural Aranwa junto a su esposo Jorge Chiarella, maestro y director de teatro al que recientemente perdimos a causa de la pandemia y, como ella cita, aún tenía mucho por hacer.
- En esta edición usted participa con la obra “En la calle del Espíritu Santo” ¿Puede contarnos un poco sobre la propuesta?
Claro, antes que nada, quiero agradecer a la ENSAD por la posibilidad de formar parte de este proyecto, siento que es una manera muy pertinente de celebrar el bicentenario, quiero felicitar ese esfuerzo porque todos los que trabajamos en la cultura vamos a recibir con gran satisfacción este tomo. Ojalá pudiéramos ver más proyectos de esta naturaleza.
En relación al texto, es una creación que parte de una historia recogida del Expediente de Causas Criminales de la Real Audiencia de Lima (1734) que se encuentra en el Archivo General de la Nación en la que una esclava es acusada de ser la instigadora del ataque contra una patrona. Después de este incidente un grupo de esclavos se ve involucrado en las acusaciones pasando por distintos padecimientos, intrigas, pasiones escondidas y riesgos al lado de coros de esperanza y libertad.
Contar esto me pareció importante porque trata de un episodio que abarca un buen periodo de la historia y del que poco se sabe, la terrible situación de la libertad suspendida devela también los diferentes estatus que existían entre los esclavos, en los que cada uno tiene que generar estrategias de sobrevivencia donde los deseos escondidos de libertad siguen imperantes. El tejido detrás de todo esto no solo es interesante, sino que de manera anecdótica podemos ver otros tipos de supresión en la actualidad: la falta de igualdad en las oportunidades, los problemas para acceder a un servicio de salud básico, entre muchos otros. Somos esclavos de una situación con la que nos es difícil batallar.
- La trama va acorde a la temática de los 200 años de independencia...
- Creo que las producciones de textos dramáticos se han incrementado muchísimo en estos años y que este volumen reuna a autores de distintas generaciones nos permite visualizar un camino más claro porque desde diferentes posturas podemos preservar la memoria de nuestra historia, iluminar nuestro camino hacia una República más consolidada. Necesitamos apostar por un país más solidario donde podamos reconocernos respetando todas las identidades que nos conforman.
- Como parte de diversas asociaciones culturales ¿Cómo visualiza el panorama de estas en un contexto de pandemia?
Lamentablemente la pandemia nos trajo una imagen de lo que se creía era la cultura. Nosotros fuimos postergados y tuvimos que hacer muchos esfuerzos por conseguir un puerto articulado en la cultura junto a distintos movimientos que se formaron tanto en Lima como en las regiones. Nosotros no accedimos a los créditos de Reactiva Perú porque, supuestamente, no había nada que reactivar.
Y, con producciones en pausa o canceladas, dinero ya invertido, locales cerrados... Establecimos un diálogo con el Ministerio de Cultura y felizmente obtuvimos respuesta, de todas maneras, es una batalla. Hemos entendido que para ser escuchados debemos realizar una serie de mecanismos y estrategias para que se nos reconozca como trabajadores de la cultura, para que se nos reconozca como un sector productivo.
- En línea con lo anterior se están realizando ya las primeras mesas de diálogo para una Nueva Ley del Artista ¿Cree que se alcancen las metas trazadas?
- Creo que sí. Creo que cualquier mecanismo que aporte a lo que es la consolidación y reivindicación de los derechos de los artistas del sector cultura es un buen camino, pero para eso debe pasar una serie de evaluaciones para afinarse y, finalmente, concretarse. También es necesario que desde los municipios se establezcan diálogos con las autoridades y los ciudadanos para generar espacios de cultura. El Estado tiene que entender que nosotros somos un motor de la vida social y política, la cultura no se basa en espectáculos, abarca mucho más. La cultura es una apuesta por la memoria colectiva, por reconstruir el país.
- Generar espacios de cultura, como menciona, es un trabajo arduo que se fortalece si se trabaja con los más pequeños, compromiso que cumple como pionera en dramaturgia infantil. Cuéntenos un poco sobre este trabajo.
Desde mis primeros años como artista he pensado que tenemos que generar espacios para las nuevas generaciones, para que puedan expresarse, para que vayan al teatro y disfruten de buenas propuestas porque tienen el derecho de vivir experiencias saludables que los ayuden a crecer y tener una buena relación con sus pares. Por eso, junto a Alberto Ísola, lanzamos el proyecto Coladecometa, para el impulso y desarrollo de las artes escénicas para la infancia.
También, me encanta que me entreviste gente joven, me interesa mucho su opinión, saber cuáles son sus preocupaciones, por dónde van caminando, por eso también soy docente. Siempre es un placer poder conversar con ellos.
- Para despedirnos, además de una vida ligada a las artes ¿Qué cree que le ha dado el teatro?
- Disciplina. Rigurosidad. El teatro me ha dado principios, conocer el valor de la palabra empeñada, detrás de nuestras obras no hay contratos, es una actividad regida por la palabra, por el compromiso con el otro. La responsabilidad y la lucha por dignificar la producción del actor es algo que permanecerá por siempre en mi vida, ideales que se cumplen también en la cotidianidad, eso me enseñaron mis maestros. El teatro te enriquece y he aportado con todo lo que he podido, espero haberlo hecho bien.
- Muchas gracias por la entrevista, Celeste.
- Gracias a ti, gracias a la ENSAD por esta producción y gracias –sobre todo– al teatro.
