Por: Marco Yanayaco.

El pasado sábado 24 de febrero, se inauguró la exposición individual “Espíritus del orbe” de la pintora Ximena López, en la Galería Martín Yépez. La muestra curada por el artista Jhoel Mamani se podrá visitar hasta fines de marzo.

La exposición agrupó un conjunto elaborado de pinturas en lienzo, las cuales mantenían la línea temática de la reflexión sobre la espiritualidad del ser humano y el ciclo armónico de la existencia. Estas toman inspiración de elementos comunes como el amor, la maternidad, la vida y lo sitúan en el terreno de la filosofía oriental budista del “Samsara” (vida, muerte y encarnación).

Adicional a ello, se presentan también temas lúdicos como el tiempo y la percepción que tenemos de él, pero sin dejar la dinámica del eterno retorno por lo que las pinturas presentan un motivo de no-final donde destacan el inevitable reinicio bajo la representación del orbe como el renacimiento en este mundo.

Resalta la profunda conexión que se tiene con la naturaleza, las flores que se abren y luego marchitan para posteriormente renacer en una semilla que simboliza el ciclo inquebrantable del regreso son evidentes en la pintura Samsara. Esto sostenido bajo la imagen de una figura femenina que representa la fecundidad. Por otro lado, tenemos también la cotidianidad y el tiempo en donde la imagen del orbe vuelve otra vez a su sitio inicial bajo un trance de movilidad de las almas. De esta manera se anuncia que el tiempo se reinicia y da la oportunidad a los seres de volver a empezar.

Cabe señalar, que la muestra cuenta con un total de 13 pinturas que apuntan hacia la introspección, la existencia, el paso del tiempo y como este vuelve a escribirse infinitamente sobre el presente, el pasado y el futuro. Una exposición que brinda las representaciones y alusiones perfectas de lo cíclico a través de los orbes, pero que a su vez crean un punto de ancla en el espacio para colocar en el público interrogantes profundas como el camino de su propia trascendencia en la vida.