Por: Carmen Zavaleta Laredo.

El Café Dédalo: Arte y Artesanía presenta la exposición “Mujeres de Luz”, la más reciente exposición de la artista Karin Hanspach. La muestra presenta una colección de lámparas artesanales hechas a mano, cada una con un diseño único que combina formas, colores y texturas en una propuesta luminosa y expresiva.

Karin Hanspach es una artista que, a través de su exposición, nos invita a conocer el entorno en el que creció, se formó y con el que se identifica. Su obra no solo busca plasmar su experiencia personal en el arte, sino también establecer una conexión profunda con su historia y sus raíces, algo que se refleja incluso en el nombre de la muestra. Al respecto, la artista comentó: “Quería honrar a todas las mujeres en el Mes de la Mujer, ya que provengo de un matriarcado, de una familia donde las mujeres han sido símbolo de fortaleza, unión, amor y sostén en el ámbito familiar. Me pareció que, teniendo la capacidad de crear objetos de luz, esta era la ocasión perfecta para rendirles homenaje”.

Para mantener la coherencia en su mensaje, la artista diseñó sus piezas de manera que reflejaran su visión de honrar a la mujer. Su fuente de inspiración fue La danza de Matisse, obra que reinterpretó de forma más lúdica, representándola exclusivamente con figuras femeninas.

“Lo que yo veía ahí era una unión, un soporte, una red de compañía y apoyo, unos vínculos que se estrechan y logran grandes causas. Quería mostrar la silueta de la mujer en movimiento, lo dinámico, la feminidad en curvas, pero de una forma más abstracta”.

A partir de esta idea, se comprende la elección de las formas de las lámparas, que en su mayoría buscan representar la silueta femenina. Asimismo, la artista incorporó la representación de conchas marinas, inspirándose en la espiral para simbolizar el constante cambio, el desarrollo y la transformación presentes en la naturaleza. La espiral, además de ser un patrón recurrente en el mundo natural, evoca un proceso de crecimiento continuo, de expansión y evolución, cualidades que también se asocian con la experiencia femenina. En este sentido, la figura de la espiral refleja la resiliencia, la adaptación y la capacidad de renovación de la mujer a lo largo de su vida.

Además, Hanspach tomó como referencia El nacimiento de Venus de Botticelli, una obra que presenta un concepto idealizado del amor, en el que la figura de Venus se desdobla en dos versiones complementarias: la Venus celeste y la Venus terrenal, representaciones del amor espiritual y el amor material, respectivamente. Esta interpretación, derivada de El Banquete de Platón, vincula la feminidad con la dualidad entre lo etéreo y lo terrenal, un simbolismo que se proyecta en la muestra Mujeres de Luz.

Venus, como diosa del amor y la belleza, es tradicionalmente vista como una figura de atracción y deseo, pero en la visión de la artista, su significado se amplía: se convierte en un símbolo de luz, de energía creadora y de sostén dentro de su entorno. En este sentido, la exposición no solo homenajea a la mujer en su dimensión visual y estética, sino que también la enaltece como fuente de sabiduría, cambio y renovación. Tal como en El Banquete, donde el amor es un camino de ascenso hacia la verdad, Mujeres de Luz propone una reflexión sobre la evolución de la mujer y su papel fundamental en la sociedad, representándola como portadora de luz en múltiples niveles: físico, emocional y espiritual. Esta metáfora se vincula directamente con la muestra, ya que, en palabras de la artista: “Simbolizan a la mujer como sostén de su entorno, como un canal de luz en la oscuridad”.

Asimismo, es importante destacar la técnica utilizada por la artista en la creación de sus piezas. Hanspach trabaja con arcilla de alta y baja temperatura, aplicando procesos de horneado que aportan distintas cualidades a sus esculturas.

“He trabajado con esculturas de baja temperatura, que han pasado por un solo horneado, una monoquema, en la cual aproveché para aplicar la pintura antes de la cocción. También utilicé arcilla de alta temperatura en elementos como las flores que caen del techo y las caracolas, las cuales han pasado por un proceso de quema adicional”.

Más allá del aspecto técnico, la artista resalta la importancia de la sostenibilidad en su práctica. Para ella, el arte no solo implica la creación de piezas, sino también la responsabilidad de preservar y respetar los materiales empleados.

“Me parece muy valioso ser sostenibles en la práctica. No se trata solo de hacer arte con cualquier recurso, sino de preservarlos y cuidarlos. Por eso me gusta trabajar con elementos más naturales y mostrar el material tal como es”.

Esta elección no solo refuerza el vínculo entre su obra y la naturaleza, sino que también subraya su compromiso con una producción artística consciente y respetuosa con el entorno.

Mujeres de Luz no es solo una muestra artística, sino una invitación a contemplar la feminidad desde una perspectiva simbólica y espiritual. A través de su obra, Karin Hanspach logra capturar la esencia de la mujer como fuente de luz, resiliencia y transformación, explorando su conexión con la naturaleza, el arte y la historia. Sus piezas, con formas orgánicas y materiales sostenibles, no solo iluminan el espacio físico, sino que también nos invitan a reflexionar sobre el papel de la mujer en la sociedad y su constante evolución. En un mundo donde la lucha por la equidad de género sigue vigente, esta exposición nos recuerda que la luz de las mujeres es indispensable, que su presencia trasciende lo material y que su fuerza radica en la unión, el amor y la capacidad de crear. Mujeres de Luz es, en esencia, un homenaje al poder femenino y a su inagotable capacidad de iluminar el camino.

Cabe señalar que la exposición Mujeres de Luz cuenta con todas sus piezas disponibles para la venta y puede visitarse en Jirón Sáenz Peña 295, Barranco 15063, en el horario de 10:00 a.m. a 8:00 p.m. La entrada es libre, ofreciendo a los visitantes la oportunidad de conocer de cerca el trabajo de Karin Hanspach y sumergirse en su universo artístico.