Por: José Villagarcía (Tano Factótum).

El pasado lunes 7 de julio se llevó a cabo la ceremonia de distinción al Dr. Alfonso Castrillón Vizcarra como profesor emérito de la Universidad Ricardo Palma, en el auditorio del Centro Cultural Ccori Wasi de dicha casa de estudios.

La actividad, celebrada en reconocimiento a su trayectoria y legado en el campo de la historia del arte, la museología y el desarrollo del pensamiento crítico que ha aportado en Latinoamérica, contó con la presencia del rector Félix Romero Revilla; la vicerrectora de investigación, Sandra Negro; y María Yllia, directora del Instituto de Investigaciones Museológicas, quien leyó la semblanza del homenajeado mientras se proyectaban imágenes de su largo y eximio trabajo en el país y el extranjero con artistas, alumnos, colegas y autoridades. Algunos de los asistentes, emocionados, se reconocían en las fotos.

Alfonso Castrillón se graduó en Literatura en la Pontificia Universidad Católica del Perú en 1963. Posteriormente, estudió Historia del Arte y Museología en la Università degli Studi di Roma. En 1967 obtuvo el doctorado en Filosofía y Letras, con especialidad en Historia del Arte, en la Universidad de Madrid. Al año siguiente se incorporó como docente del Departamento de Arte de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y, dos años después, asumió la dirección del Museo de Arte y el Museo de Historia de San Marcos. Desde entonces ha dirigido diversos museos y proyectos culturales.

En 1983 publicó su icónico libro Museo peruano: utopía y realidad. El 7 de julio de 1997 logró la inauguración de la Galería de Artes Visuales de la URP en el campus universitario (trasladada en 2005 a su actual sede en Miraflores). Al año siguiente propuso el Diplomado en Museología, que en apenas un año se convirtió en la Maestría en Museología y Gestión Cultural. Tras la lectura de la resolución del Consejo Universitario, a cargo de la Dra. Sandra Negro, se le otorgó el diploma y la medalla correspondientes por parte de las autoridades presentes, en medio del agradecido y afectuoso aplauso del público.

A su turno, Alfonso Castrillón agradeció a las autoridades por el reconocimiento y se dirigió al público: “Han pasado los años, pero recuerdo que con queridos amigos organizamos la Maestría en Museología en 1998, en 2000 se creó el Instituto de Investigaciones Museológicas y Artísticas, donde además fundamos la revista Illapa Mana Tukukuq, que continúa activa aportando de manera valiosa a la construcción de los ideales y valores de la cultura peruana”.

El homenajeado continuó: “Nuestra intención siempre fue clara: dedicarnos al estudio e investigación de nuestro patrimonio, trabajando en un ambiente de colaboración y amistad con la firme voluntad de sensibilizar al público y formar un grupo sólido de alumnos y profesionales que hoy se desempeñan plenamente en el campo de la museología. Los primeros años no fueron sencillos. Se requirió de esfuerzo y perseverancia para generar conciencia entre tantos docentes, estudiantes y la comunidad en general, sobre la importancia de la conservación y el papel de los museos en la formación de una ciudadanía consciente de sus valores culturales”.

El Dr. Félix Romero prosiguió dirigiéndose a la concurrencia que llenaba la sala: “Esto es una muestra del conocimiento y reconocimiento de la obra del Dr. Alfonso Castrillón. Como ya se ha dicho, él es docente, investigador, curador, ha sido y es una excelente persona. Esta es una distinción al docente que ha hecho méritos en toda su carrera. Esta iniciativa de distinguir a los mejores profesores e intelectuales nació del Dr. Iván Rodríguez Chávez (anterior rector de la URP) y nosotros como continuadores de su gestión tenemos que rendir homenaje a personalidades como el Dr. Alfonso Castrillón. Él siempre se ha destacado por ser un profesor importante, indispensable, en el área de museología, sosteniendo en el tiempo a la maestría. Ha tenido importantes promociones de profesionales que están prestando servicio en el país y en el extranjero”.

Tras la ceremonia, muchos de los asistentes quisieron saludar personalmente al Dr. Castrillón e hicieron una fila para subir al escenario. Mientras esperaban, departían entre brindis y bocaditos, recordando y compartiendo anécdotas con el homenajeado, quien saludaba y agradecía uno a uno a sus invitados. La larga cola, que parecía no acabar, finalmente llegó a su fin. Lejos de retirarse, el Dr. Castrillón se tomó un tiempo para tomarse fotos con el equipo de la galería: personal administrativo, de montaje, limpieza y seguridad. A quienes tenemos la suerte de visitar frecuentemente la galería ya los conocemos, quienes siempre dan la bienvenida a los visitantes con una sonrisa.

Quedará en la memoria de todos los asistentes el merecido reconocimiento a un verdadero líder del arte y la cultura en el país, así como también ese último abrazo con la señora Nelly, del equipo de limpieza, mientras le decía: “Gracias por todo”.